Si hablamos de cambios de vida, un hijo siempre está en el tope de la lista. Más aún, si llega de manera inesperada, cuando tienes otro planes y vives una etapa en la que no te sientes preparado.
Esa es la historia de Paola, que nos cuenta su transformación, de ser universitaria soltera a convertirse en madre y esposa trabajadora:
«En mi penúltimo año de bachillerato, me enteré que estaba esperando un bebé.
En el momento, fue una noticia horrible, ya que aún no terminaba de estudiar (mi carrera es una larguísima), trabajaba solo a medio tiempo y aún no estaba casada con el papá de mi bebé, que hoy tiene seis meses.
Los primeros tres meses del embarazo fueron muy tristes, estuve en una depresión, y por consiguiente, bajé mis notas en la universidad, que era para mí algo sumamente importante.
Me casé cuando tenía dos meses de embarazo y la noticia aún me causaba tristeza. Cuando estás en esa situación, todos comienzan a expresar frases como: ‘se acabó tu vida’, ‘ya no terminarás de estudiar’ y ‘ahora solo puedes dedicarte a tu hijo’.
Sin embargo, donde muchos ven limitación, yo pude ver una razón más para salir hacia adelante. Mi esposo y yo comenzamos a educarnos, comenzamos a tomar clases de crianza positiva y todas las clases que encontramos de parto, manejo de dolor, cuidados de recién nacido, entre otras. Decidimos ser los mejores padres que pudiéramos ser para Mateo.
Hoy, puedo decir que terminé mi bachillerato lactando a tiempo completo a Mateo. Puedo decir que mi esposo ha sido mi apoyo en todo momento y que he tenido el apoyo de mi familia en este proceso. Hoy trabajo junto a mi esposo y papá a tiempo completo. Hoy manejo las redes de nuestro negocio familiar, trabajo en el negocio en el servicio al cliente y me encargo de muchas otras cosas.
Solo le debo a Dios las fuerzas, motivación y amor que ha sembrado en mí a diario para sobrellevar el proceso. Trabajo, soy mamá y esposa full time ☑️»
Deja una respuesta